Trasplante renal Cuando los riñones han enfermado de forma muy significativa y llegan a la fase de Insuficencia renal (el porcentaje de funcionamiento es insuficiente para mantener a una persona con vida) se debe optar por técnicas de sustitución renal. Las más conocidas son aquellas llamadas DIALISIS de las que hemos hablado previamente en otras publicaciones, sin embargo, existe otra opción en estos casos EL TRASPLANTE RENAL. Trasplantar un órgano, en este caso el riñón, quiere decir colocar un órgano sano en el cuerpo de un paciente afecto de insuficiencia renal. De forma habitual el trasplante renal se clasifica en “de donante vivo” y “de donante fallecido”. Me detendré un poco a explicar este punto; “de donante vivo” implica una persona sana relacionada con el paciente (padres, pareja, hijo/a, hermano/a) dona un riñón a su familiar y se queda únicamente con un riñón funcionante (que permite una vida normal). Por otra parte “ de donante fallecido”significa que una persona no relacionada que fallece (muerte cerebral) por otras causas pero su cuerpo está de base sano, dona sus órganos y los pacientes que se encuentran aptos para recibir un órgano bajos ciertos criterios establecidos en una lista de espera de trasplante, reciben ese órgano. El trasplante es un tratamiento complejo, tanto el paciente como el donante (en el caso de donante vivo) se investigan de forma exhaustiva para probar ser aptos para el mismo. Para mantener un órgano trasplantado funcionando se requiere de forma permanente medicación (inmunosupresores) y controles médicos de especialidad periódicos. Este tratamiento no está exento de riesgos pero también tiene muchos beneficios, está ampliamente descrito en la literatura médica que es el mejor tratamiento para la enfermedad renal crónica. Preguntas frecuentes sobre trasplante renal: ¿Me quitan los riñones enfermos?No, se implanta el riñón en otra localización a los riñones nativos, generalmente en la zona lateral inferior derecha del abdomen. ¿Con el trasplante me curo? No, es la técnica de sustitución renal más efectiva pero NO es una cura. El paciente requiere medicación y seguimiento de por vida. ¿Es para siempre? No, la duración del trasplante depende de muchísimas variables, en los mejores casos se describe varias décadas con el trasplante funcionante.